Con gran gozo os hacemos partícipes de un acontecimiento de gran bendición para nuestra iglesia, la profesión de fe de nuestra hermana Vanessa Costa, que tuvo lugar el pasado 17 de junio. Su testimonio de fe fue de gran edificación para la comunidad. Aquí os dejamos algunas de sus palabras:
"[...] Oraba y decía a Dios que me sentía como el etíope eunuco de Hechos de los Apóstoles 8, que leía al profeta Isaías, pero no comprendía, y que luego, al acudir Felipe, oyendo que leía al profeta Isaías, le dijo: 'Mas, ¿entiendes lo que lees?' Y este replicó: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese, y se sentase con él (Hechos 8: 30-31). Así yo oraba a Dios en busca de alguien que pudiera enseñarme (...).
Cuando pienso en el la doctrina de la elección, en el amor de Dios por mí, en cómo Dios abrió mis ojos, pasando de las tinieblas a la luz, yo me quedo maravillada por su gracia, por su amor al elegirme como su hija, al poder ser parte del pueblo del Señor. Yo amo su Palabra y lo que más quiero es poder enseñar a mis niñas en el camino del Señor."
Que el Señor de la Iglesia llene de dicha y bendición a Vanessa y a su familia; y que su testimonio de amor al Señor nos sirva para confirmar nuestra nuestra fe en sus promesas. Solo a Él la gloria.